El principio más importante de la comunicación es el siguiente: La forma condiciona el contenido
Esto implica que hay que disponer de un núcleo interior sólido pues el significado que le damos a la relación depende del lenguaje no verbal (gestos, entonación, postura…).
El lenguaje no verbal y el verbal son inseparables. Este paralelismo estima que el 35 % del significado social de lo que expresamos se debe a las palabras y el 65 % restante al lenguaje no verbal.
La comunicación puede ser:
Carismática o caliente: es próxima, bidireccional, libre, estética y connotativa (con valor afectivo o evocador).
Funcional o fría: es lejana, unidireccional, restringida y denotativa (carece de matices).
La comunicación se despliega en 5 dimensiones:
Intrapersonal. Con uno mismo.
Interpersonal. Entre dos personas.
Grupal. Entre los miembros de un grupo.
Publica. A un auditorio.
Masiva. A través de la prensa, la radio y la televisión.
La función principal de la comunicación es crear y mantener relaciones. Estas relaciones pueden ser de cuatro tipos:
Complementarias: la relación se basa en la desigualdad y es de cooperación. Se trabaja en equipo. Hay respeto por la diferencia. La relación es estable.
Simétricas: la relación se basa en la igualdad y hay dependencia. Las personas confunden sus funciones laborales. La relación es inestable y el conflicto frecuente. Hay que definir bien las funciones de cada uno, la posición en la jerarquía y el sistema de comunicación que se utiliza.
Ausentes: en la relación existen tabúes (cosas sobre las que no se habla). Se producen silencios implícitos y es frecuente el rumor. Hay que disolver los silencios.
Patológicas: en la relación hay paradojas, o sea, contradicciones que no se pueden resolver desde la lógica. Las intenciones son difusas y en ocasiones destructivas. Las paradojas continuadas conducen a relaciones enfermizas. Hay que desmontar las paradojas y aclarar las intenciones.
Además tiene tres efectos generales:
Refuerza de opiniones y actitudes previamente establecidas
Modifica actitudes y opiniones
Desencadena comportamientos determinados
El discurso comunicativo presenta dos enfoques generales:
Inductivo: parte de lo particular (una experiencia, un ejemplo…) y desemboca en lo general.
Deductivo: parte de lo general (una idea, una teoría…) y desemboca en lo particular.
Además responde a 4 funciones
Informar
Persuadir
Entretener
Educar
La comunicación intrapersonal
Es la que realizamos con nosotros mismos e implica trabajr en tu desarrollo personal
La comunicación interpersonal
Para que la comunicación sea efectiva necesitas ser asertivo. La asertividad es el derecho y la libertad interior que tienes para expresar tu punto de vista y tus sentimientos propios. Sin embargo, al hacerlo no debes violar los derechos, ni las libertades de los demás.
La comunicación interpersonal tiene 5 fases:
Saludar. Acoger al otro para crear un clima favorable
Escuchar y preguntar para comprender realmente al otro
Informar. Aportar datos a la conversación
Despedirse. Para rebajar la tensión que se crea en cualquier relación
Existen tres principios comunicativos
La empatía. La capacidad de ponerte en el lugar del otro y escucharlo para comprenderlo realmente.
El entusiasmo. Implica una actitud positiva y un buen nivel de autodominio en la comunicación. Se cultiva mediante la fe
El conocimiento (Know How) que posees y transmites.
La comunicación grupal
Existen patrones de comunicación. Hay que detectarlos y gestionarlos. Son de tres tipos:
De refuerzo
Compensadores
De deterioro
Para gestionar la comunicación interna en una organización hay que localizar la arquitectura de la comunicación y crear un modelo que responda a sus necesidades.
El objetivo es medir la rentabilidad de la comunicación, es decir, la relación que hay entre el mensaje que se transmite y el grado de interiorización que se logra.
La comunicación pública
Es importante conocer el contexto en el que vamos a dar una charla, concretamente:
La opinión pública
Los líderes de opinión
Los grupos de presión.
Además es necesario saber:
El público al que nos dirigimos (edad, formación, necesidades…)
El discurso (metáforas, jerarquía, ritmo, sentido del humor, lenguaje a utilizar…)
Las características que debe atesorar un buen emisor (veracidad, naturalidad…)
También es importante dominar el miedo escénico, cuidar la imagen personal, saber utilizar la tecnología, utilizar fichas de apoyo y manejar muy bien el lenguaje no verbal.
A la hora de hablar en público es necesario tener en cuenta cuatro fases consecutivas:
La planificación del discurso
¿Cómo captar la atención del público?
¿Cómo mantener la atención del público?
¿Cómo concluir con éxito?