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CREACION DE REALIDAD PROPIA

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CREACION DE REALIDAD PROPIA

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competencia

CREACION DE REALIDAD PROPIA

Área: El Poder de la Mente

Definición

Habilidad para crear las experiencias de realidad por las que se desea transitar en la vida.
Capacidad para modificar los supuestos desde los cuales funcionamos sin cuestionarlos (o sistema de creencias), transformar aspectos de nuestra personalidad y materializar un deseo en la realidad física.

Preguntas Clave

  • ¿Eres consciente del sistema erroneo de creencias en el que vives?
  • ¿Conoces los aspectos de tu personalidad que actúan como resistencias, a la hora de materializar tus deseos?
  • ¿Conoces tus virtudes personales?
  • ¿Sabes diferenciar un deseo de una fantasía?
  • ¿Tienes claro el sistema de creencias en el que deseas vivir?
  • ¿Te esfuerzas en crear las condiciones propicias para que la percepción que tienes sobre la realidad y sobre ti mismo se modifique?
  • ¿Eres capaz de rendirte al espíritu y servir a la mejor de las causas en la vida?
  • ¿Te sientes merecedor de lo mejor en la vida?

Acciones o comportamientos asociados

  • Te entregas al espíritu (o a la realidad subatómica). Todos los días recitas una serie de decretos en los que te comprometes con la voluntad de Dios, entregándole tu corazón y tu alma, sintiéndote merecedor de lo mejor en la vida, sirviendo a la mejor de las causas en la vida y siendo una manifestación divina de Dios.
  • Escribes (o recitas en voz alta) el sistema de creencias en el que deseas vivir. Cinco días a la semana escribes (o recitas en voz alta), durante al menos 15 minutos, los supuestos desde los cuales deseas funcionar de manera espontánea y los enriqueces (o clarificas) de manera dinámica con nuevas frases.
  • Visualizas la realidad que deseas experimentar. Utilizas la imaginación para incorporar a tu personalidad las virtudes que más te favorecen y para concentrar tu energía en el deseo a materializar.
  • Te mantienes atento a las señales (información, encuentros, señales de la naturaleza...). Las tienes en cuenta para determinar si vas por buen camino y para tomar decisiones acertadas. Aprovechas las oportunidades que surgen.
  • Cuidas tu salud física con esmero. Te alimentas e hidratas correctamente, descansas lo suficiente, haces ejercicio físico sin agotarte, respiras aire de calidad de forma completa, tomas el sol regularmente y depuras tu organismo.
  • Regulas tus estados de ánimo. No culpabilizas a otros ni a ti mismo de tus estados emocionales negativos, aceptas tu dolor interno como un aliado de tu crecimiento y transformas la negatividad en placer y en sentimientos positivos. Estableces un diálogo interno positivo contigo mismo. Entrenas el recurso del observador.
  • Controlas tu mente. Revisas la intención que precede a tus acciones, pones atención al momento presente y sigues las disciplinas que te aportan valor con perseverancia y voluntad de propósito. Elaboras pensamientos positivos y evitas los juicios de valor y la rumiación destructiva. No luchas por tener razón y, en su lugar, sugieres o haces preguntas inteligentes. Entrenas el recurso del visionario.
  • Gestionas tus relaciones. Revisas la calidad y la intensidad de tus encuentros, estableces límites saludables, pides ayuda cuando la necesitas, equilibras lo que das con lo que recibes del otro, perdonas a los demás por todo aquello que hicieron y que sentistes perjudicial para ti, te perdonas a ti mismo, revisas las tareas y los roles que desempeñas y te comprometes a apoyar al otro en su camino.

Resultados, éxitos esperados

  1. Modificas la estructura cognitiva que determina el sistema erroneo de creencias en el que vives.
  2. Vences la resistencia que opone tu cuerpo a que cambies de sistema de creencias.
  3. Mejoras tu sistema de relaciones.
  4. Te rodeas de personas que contribuyen a realizar tu misión de vida y te proteges de influencias negativas.
  5. Creas sentimientos positivos en relación a la realidad que deseas experimentar.
  6. Recibes señales y oportunidades favorables del universo.
  7. Experimentas la realidad que deseas vivir o la que te acerca a tus propósitos.